Cómo escalar un negocio: 7 pasos probados para tener éxito
Alrededor del 74% de las startups fracasan debido a una ampliación prematura, que se produce cuando un negocio en crecimiento contrata a nuevos empleados, añade demasiadas funciones y entra en nuevos mercados antes de establecer plenamente sus productos y su plan de negocio.
Antes de escalar tu negocio, asegúrate de haber establecido unos cimientos sólidos y unos objetivos definidos. En este artículo, cubriremos estos y otros pasos importantes en el proceso de escalar un negocio. También abordaremos los errores más comunes que cometen las pequeñas empresas al escalar y cómo esto difiere del crecimiento.
Tabla de Contenidos
Cómo escalar un negocio
1. Evaluar tu sistema actual
2. Establecer objetivos definitivos
3. Desarrollar tu equipo
4. Dar prioridad a los clientes
5. Mejorar las operaciones
6. Ampliar las asociaciones
7. Optimizar las tasas de conversión
Una vez que tengas un equipo sólido y las herramientas adecuadas, es hora de empezar a escalar tu negocio. Esta sección te explicará siete pasos para hacerlo.
1. Evaluar tu sistema actual
Un buen sistema es esencial para alcanzar tus metas empresariales. Crea un proceso que permite que las actividades empresariales, como las operaciones, la facturación y el marketing, se desarrollen de forma estructurada y organizada.
Necesitas evaluar cuidadosamente para implementar un sistema exitoso y sostenible. Se pueden utilizar varios indicadores para evaluar el sistema, entre los que se incluyen:
- Conversión de ventas
- Márgenes de beneficios
- Gastos
- Procesos repetibles
La planificación también es crucial para guiarte hacia tus metas. Predecir el crecimiento de tu empresa, desde las cifras de ventas y los nuevos clientes hasta los ingresos que pretendes generar cada mes, te permitirá crear un plan más realista para tu negocio.
Además, crear un sistema empresarial eficaz te ayudará a cumplir las expectativas de los clientes y a resolver problemas. Por otra parte, conocer los puntos fuertes de tu negocio, como tu misión y tus valores, te permitirá crear una base sólida para tu negocio.
2. Establecer objetivos definitivos
A la hora de escalar tu negocio, tener una meta clara te ayuda a dirigir tu empresa en la dirección correcta y a centrarte en el panorama general. Define objetivos SMART: específicos, medibles, alcanzables, realistas y con un plazo definido.
- Específicos: evita crear objetivos poco concretos, como “Quiero invertir en mi producto”. En su lugar, céntrate en las características únicas que quieres añadir al producto.
- Medibles: asegúrate de que tus objetivos incluyan cifras concretas, por ejemplo, aumentar tus ingresos un 20% o en 1.000 dólares.
- Alcanzables: comprueba si tus objetivos están dentro del ámbito de tu sector. Por ejemplo, consulta con desarrolladores web profesionales si es técnicamente posible añadir una función concreta.
- Realistas: asegúrate de que dispones de recursos humanos o económicos suficientes para completar tus objetivos.
- Con plazo definido: crea un plazo razonable para tus planes.
Antes de fijar tus objetivos empresariales, puedes intentar dividirlos en objetivos a corto y largo plazo.
Además, utiliza el sistema de resultados clave por objetivos (OKR) para ayudarte a seguir y medir tus resultados.
Supongamos que tu objetivo es ofrecer el mejor servicio de entrega del sector. Entonces, los resultados clave serán recopilar opiniones de 100 compradores importantes, entrevistar a 200 antiguos clientes y conseguir un índice de satisfacción de al menos 4,5 sobre 5.
3. Desarrollar tu equipo
Al escalar tu negocio, tu equipo tendrá más trabajo debido al aumento de clientes. Por tanto, piensa en cuántas personas necesitas contratar. Intenta contratar sólo a los mejores talentos con capacidad de liderazgo preparados para el rápido crecimiento de tu empresa.
Además de contratar, asegúrate de que tu equipo actual se adapte a las nuevas cargas de trabajo. Si lo haces, ayudarás a tu equipo actual a formar con éxito a los nuevos empleados.
Fomenta un entorno laboral y una cultura corporativa que incite a la excelencia. Por ejemplo, puedes dar feedback positivo o recompensar a tus empleados por los grandes resultados. Esto les hará sentirse más apreciados.
La comunicación abierta fortalece la confianza entre tú y tu equipo, facilitando la delegación de tareas y la eficiencia. Desarrollarla te ayudará a delegar tareas fácilmente sin microgestionar a tus empleados. Como resultado, tus empleados podrán dirigir el negocio incluso cuando tú no estés.
También puedes contratar a una agencia o a un autónomo para que te ayuden a escalar más rápido tu pequeña empresa.
4. Priorizar a los clientes
La satisfacción del cliente es esencial para el éxito de cualquier negocio. Puedes mejorar la satisfacción de tus clientes y lograr su fidelización haciendo hincapié en ese aspecto.
Utiliza un programa de referidos como Koodo para ayudarte a generar nuevos clientes potenciales y aumentar las ventas. Tus consumidores fieles pueden recibir diversas recompensas a través del programa, como descuentos y productos gratuitos.
La mayoría de las empresas compiten por conseguir más clientes ofreciendo diversas promociones. Para entender mejor lo que necesitan los clientes, intenta entablar relaciones con ellos. Esto te ayudará a entender qué productos y servicios debes desarrollar.
Además, hay que centrarse en mejorar la experiencia del usuario y ofrecer un buen servicio. Por ejemplo, ofrecer servicios de asistencia 24/7 ayuda a resolver más rápidamente los problemas de los clientes. Como resultado, tendrás más clientes potenciales y aumentarás las ventas repetidas.
Muchos grandes negocios dan prioridad a los clientes. Por ejemplo, Amazon ofrece una experiencia de compra en línea con una navegación sencilla, varias selecciones de productos y envío gratuito.
5. Mejorar las operaciones
Cuando quieras aumentar la productividad e impulsar tus ventas, debes empezar por mejorar las operaciones de tu negocio. Desarrollar una sólida gestión de las operaciones te ayudará a cuidar los productos, los servicios y las personas.
Por ejemplo, si actualmente toma una semana recibir, procesar y enviar un pedido, busca maneras de acortar ese tiempo a 3 o 4 días sin comprometer la calidad. Esto podría implicar implementar un nuevo software de seguimiento de inventario o revisar y actualizar los flujos de trabajo internos.
Como resultado, podrás centrarte más en mantener la calidad de tus productos. Esto ayudará a tu marca a conseguir más clientes y a ganarte su fidelidad.
Para que tu empresa sea más productiva, simplifica y agiliza las tareas utilizando un software empresarial. Por ejemplo, si las facturas se manejan manualmente y esto toma demasiado tiempo, considera utilizar una herramienta como FreshBooks, que ofrece una solución de contabilidad que te ayuda a gestionar las finanzas de forma más eficiente.
Además, pide a tus empleados que compartan cómo mejorarían las operaciones del negocio. Esto les hará sentirse más valiosos y te ayudará a escalar con éxito tu negocio.
6. Ampliar las asociaciones
Con la estrategia de asociación adecuada, una empresa puede llegar a nuevos mercados, añadir más valor, aumentar el conocimiento de la marca y ser más competitiva en el sector. Por ejemplo, McDonald’s y Coca-Cola han utilizado con éxito esta estrategia para ampliar su mercado y añadir valor para sus consumidores ofreciendo comidas innovadoras y diseñando nuevos envases para las bebidas.
Antes de iniciar una asociación, es necesario conocer los valores y objetivos del socio. Algunas empresas se centran en los beneficios, mientras que otras dan prioridad a la satisfacción del cliente. Si te asocias con una empresa que no tiene los mismos objetivos, es posible que no alcances el éxito a largo plazo debido al choque de valores.
Además, prioriza qué empresas son adecuadas para tu negocio. Por ejemplo, puedes asociarte con una marca que atienda a los mismos compradores principales que tú. Si ofreces un servicio de diseño web, podrías asociarte con una empresa de creación de páginas web que pueda ofrecer tus plantillas diseñadas.
7. Optimizar las tasas de conversión
Tu tasa de conversión es el porcentaje de visitantes de tu sitio web que realizaron una acción deseada, desde hacer clic en un botón y rellenar un formulario hasta realizar una compra. La mayoría de los sitios web tienen muchos objetivos de conversión, y cada uno tiene su tasa.
Optimizar las tasas de conversión permite aumentar los ingresos, reducir los costes de adquisición de clientes y conseguir más clientes potenciales. Como resultado, el negocio puede tener un crecimiento sostenible.
Puedes calcular tu tasa de conversión dividiendo el número de conversiones por el número de visitantes del sitio web y multiplicando ese número por 100 para obtener un porcentaje. Por ejemplo, si tuvieras 100 ventas de 1.000 visitantes, tu tasa de conversión sería del 10%.
Para optimizar tu tasa de conversión, identifica tus objetivos de conversión y qué parte quieres mejorar. Por ejemplo, céntrate en la conversión que ayuda a tu rendimiento de marketing, como cuántos clientes se suscriben a tu boletín por correo electrónico.
A continuación, haz una oferta irresistible. Esto incluye utilizar productos con imágenes de alta calidad, crear un titular claro que muestre tu propuesta de valor y mantener un buen rendimiento del sitio web.
Señales de que tu empresa está lista para escalar
Antes de aprender a escalar un negocio, debes saber si tu empresa está preparada para ello. He aquí los signos de ello:
- Rechazar oportunidades potenciales: Ocurre cuando tus empleados ya no pueden asumir la carga de trabajo. Como resultado, la captación de nuevos clientes disminuiría la calidad de tu servicio.
- Alcanzar todos los objetivos a corto plazo: Cuando tu empresa puede alcanzar sus objetivos a corto plazo y sus ingresos aumentan. Sin embargo, tiene dificultades para alcanzar los objetivos a largo plazo.
- Fuerte flujo de caja: Indica que los activos líquidos de tu empresa están creciendo. Sigues gestionando tu negocio, lo que incluye pagar a tus empleados, cubrir los costes operativos y comprar inventario sin problemas significativos.
¿Qué se necesita para empezar a escalar un negocio?
Es esencial contratar a personas que tengan la mentalidad y el deseo adecuados para escalar tu pequeña empresa. Por ejemplo, tener un equipo de apoyo con una mentalidad orientada al cliente te hará comprender mejor las necesidades de tu nicho. Como resultado, sabrás qué características de tu producto debes desarrollar.
Sin embargo, gastar dinero únicamente en mejores equipos, nuevas contrataciones o marketing no puede garantizar el éxito a la hora de escalar tu negocio. Aparte de eso, tendrás que mejorar tu flujo de trabajo, tus procesos internos, comprar un hosting web profesional y obtener un sistema CRM.
Existen muchas herramientas de colaboración en línea para mejorar la experiencia de compra, las ventas y la producción que te ayudarán a hacer crecer tu negocio. Además, facilitan la comunicación con tu equipo. Por ejemplo, herramientas de comunicación como Slack o Microsoft Teams te permiten compartir archivos con los empleados, hacer llamadas y organizar videoconferencias.
Para ayudar a construir tus relaciones con los clientes, utiliza un software de gestión de clientes, como HubSpot, Zoho y Salesforce. Esto te ayudará a recopilar la información de los clientes en un único lugar, lo que permitirá a tu equipo acceder a los datos con facilidad.
Diferencia entre escalar y hacer crecer tu negocio
El crecimiento empresarial consiste en añadir nuevos recursos para aumentar los ingresos. La mayoría de los empresarios contratarán más empleados y añadirán nuevas funciones a la tecnología para apoyar el crecimiento, aunque puede que aún no las necesiten.
Mientras tanto, escalar un negocio significa que los beneficios de la empresa aumentan sin ninguna adición significativa, incluidos costes y equipos. En resumen, tu empresa crece apoyándose en la financiación, las herramientas y las capacidades de tu equipo adecuadas.
Por ejemplo, puedes utilizar herramientas de marketing por correo electrónico para conseguir más ventas a menor coste en lugar de pagar anuncios en determinadas revistas o canales de televisión.
En general, la principal diferencia entre el crecimiento y la escala de una empresa son los costes en que incurre la empresa al ampliar el negocio. Además, la adición de nuevos recursos puede dar lugar a otros obstáculos y también puede aumentar la tasa de rotación.
Google es un ejemplo de éxito de escalar. La empresa ha encontrado la forma correcta de añadir más clientes rápidamente utilizando estrategias que ahorran tiempo y dinero, como contratar únicamente a expertos y centrarse en el desarrollo de productos. El resultado es un crecimiento constante.
Errores que hay que evitar al escalar un negocio
Escalar un negocio puede ser emocionante para el propietario de una pequeña empresa, pero también puede encontrarse con varios obstáculos inesperados.
Teniendo esto en cuenta, vamos a tratar los errores más comunes que hay que evitar a la hora de escalar un negocio:
- No tener unos cimientos sólidos: Antes de escalar un negocio, es crucial que te asegures de que tu empresa ya tiene una visión, una misión, una cultura y unos objetivos. Cuando estos elementos estén en su sitio, podrás aplicar con éxito una estrategia, gestionar el flujo de caja u optimizar el flujo de trabajo, ya que sabrás lo que quieres conseguir.
- Contratación deficiente: Para que tu empresa funcione sin problemas, necesitas encontrar a los empleados adecuados que sigan la visión y la misión de la empresa.
- Añadir funciones innecesarias: A medida que su negocio crece, muchas empresas intentan añadir nuevas funciones sin tener en cuenta lo que quieren los consumidores. Como resultado, sus negocios se centran menos en los clientes.
- Centrarse sólo en los números, no en la calidad: La mayoría de las empresas tienen como objetivo reducir costes para conseguir más clientes potenciales, sin tener en cuenta la calidad del servicio o la satisfacción del cliente. La obsesión por el cliente te ayudará a atraer a compradores valiosos.
- Crecer demasiado rápido: Ver crecer tus beneficios es emocionante, pero eso no significa que tengas que escalar tu negocio sin más consideraciones. Tienes que asegurarte de que puedes mantener satisfechos a tus consumidores.
Conclusión
Escalar un negocio es un reto para la mayoría de los nuevos empresarios. Se necesita un modelo de negocio completo, un equipo fuerte, buenos planes y las herramientas adecuadas. Sin embargo, si tienes un plan de negocio sólido y un compromiso con tus consumidores, las posibilidades de expandir tu empresa con éxito son altas.
He aquí un rápido resumen de cómo escalar un negocio:
- Evaluar el sistema actual para saber si puede sostener tu empresa.
- Establecer objetivos definitivos que te ayuden a dirigir tu empresa.
- Desarrollar tu equipo para que la empresa funcione sin problemas.
- Priorizar a tus clientes para conseguir su fidelización.
- Mejorar las operaciones para aumentar la productividad de tu empresa.
- Ampliar las asociaciones para ofrecer soluciones innovadoras.
- Optimizar la tasa de conversión para aumentar los ingresos.
Esperamos que este artículo te ayude a escalar tu negocio. Buena suerte, y deja un comentario a continuación si tienes más preguntas o sugerencias.